martes, 19 de marzo de 2013

Lecturas de madrugada.

No puedo conciliar el sueño, mañana tengo una prueba de matemáticas y eso me tiene un tanto preocupado y sin poder dormir. Nada más me queda por hacer que esperar a que Morfeo se acuerde de mí. Y mientras espero que eso suceda dedicaré el insomnio a pequeñas lecturas de blogs, como me encanta hacer. Pero antes de eso eh decidido dar unos pequeños "tips" para tener un agradable ambiente al momento de leer. No se comparan con estar en la playa o en un bosque, que en mi opinión serían lugares perfectos para leer, pero si estás en la ciudad en tu pieza ayudarán mucho. Primero que todo enciende un incienso, de preferencia que sea el que más te guste, en mi caso el de cannabis o lirio; Luego baja un poco la intensidad de la luz, que se adecue a tu vista, abre un poco la ventana para que el aroma del incienso no se vuelva molesto, después prepara tu café (o té) favorito, para acompañar, y por último, un poco de música ayuda a cualquiera, pero procura que no sea tal que te distraiga de tu lectura y  a un volumen moderado. Es así como creas el ambiente perfecto (en mí opinión) para una noche de insomnio y de hermosa lectura que transporta y convierte ese aburrimiento excesivo en viajes a través de la mente y alma.

jueves, 28 de febrero de 2013

Cero cuatro, cero cuatro.

Aquí va otra noche de verano sin poder dormir, el insomnio se ha vuelto parte de mi este último tiempo. La razón? descontrol total de mis pensamientos. Locos, un poco paranoicos, pero no hay nada que pueda hacerles reflexionar, nada que les diga "para! te estás haciendo daño". Las cosas suelen afectarme más de lo que deberían y eso me mantiene en un estado de desánimo. Son muchas las cosas nuevas que vienen y no sé como enfrentarlas, no tengo idea que camino estoy tomando, estoy siguiendo mi instinto. 

Ya no veo las cosas de la misma manera, las canciones que (sólo) sirven para guardar recuerdos me hacen pensar que los amigos se irán, y aparecerá gente nueva; es un ir y devenir de cosas con una inconsecuencia que me mata, nunca sé lo que el destino me depara, suelo desear cosas y las veo cumplirse años más tarde.
Y cuando aparecen suelen no ser tan perfectas como las imaginaba. ¿Habrá alguna formula para estar satisfecho alguna vez? Es tan parte de mí querer siempre lo que a la primera no puedo conseguir. 

Ahora llegaste tú a mi vida, de una forma bastante extraña... 

Casi completo, con sueños  y una herida que te carcome día a día, buscando un salvador que te guíe por el buen camino y te haga sentir amado. Dispuesto a darlo todo por conseguir esa felicidad, viviendo el día día, de lugar en lugar como un espíritu libre que busca reencarnar en un cuerpo sano. ¿Me buscaste a mí? ¿Soy el elegido?, no estoy preparado para todo esto, quizás no soy yo lo que buscas o quizás no eres tú lo que busco, no lo sé, mi cabeza va a explotar! 

Ay! necesito mantener mi cabeza ocupada, menos mal que en una semana entro a clases, así tendré tan poco tiempo para mí, y mis pensamientos que por último el insomnio desaparecerá.




martes, 12 de febrero de 2013

Insomnio.

Despiertas, algo escuchas, ¿las paredes hablan? no, es el eco de tu voz, algo gritaste al despertar que te dio vergüenza  pensando que estaba todo el mundo escuchándote  te tapaste hasta las orejas, medio dormido te das cuenta que nadie te ha oído, estás en medio de la noche, las 03:30 de la madrugada, te ríes de ti mismo y piensas, que huevón más grande. te das media vuelta cierras los ojos, intentas dormir. Luego de variadas poses y fracasos de concentración decides levantarte por un vaso de agua. Cruje la puerta al girar la manija, sólo tus pisadas suenan al unísono con el ladrido de los perros que se escuchan a lo lejos, no ves nada más que tu sombra reflejada con la luz de la luna en la sala de estar bajo el traga luz, entras al baño para mirarte al espejo, algo raro notas en tu cara, son esas ojeras de media noche; orinas, te lavas las manos y bebes mucha agua, en eso dos ojos observándote plácidamente contemplan todos tus movimientos que por sí son muy lentos y sin energía; es tu perra que al igual que tú por equis motivo está despierta, la miras fijamente, la saludas y vuelves a la cama, te acuestas, enciendes el notebook, te pones a escuchar música, cierras los ojos en un nuevo intento de poder dormir, no pasan más de cuatro canciones y suspiras como queriendo decir "a la mierda" ahora sólo te queda escribir esperando que pasen las horas porque sabes que ya viene un nuevo día y tienes que levantarte.